Horticultoras y UMAG inician alianza para fortalecer soberanía alimentaria

Asistentes a la reunión en el Museo del Recuerdo del Instituto de la Patagonia.

Horticultoras y UMAG inician alianza para fortalecer soberanía alimentaria

El Instituto de la Patagonia reunió a agricultoras y actores institucionales en una jornada que marcó el inicio de una vinculación territorial activa entre el Centro Hortícola “Lothar Blunck”, INDAP y la comunidad rural, con énfasis en la investigación agroecológica, la producción con valor agregado y la creación de un refugio biocultural.

El encuentro se realizó en el Centro de Documentación.

Construir soberanía alimentaria desde Magallanes fue uno de los ejes que reunió a autoridades, académicos y agricultoras en el Instituto de la Patagonia de la Universidad de Magallanes (UMAG). La jornada se enmarca en el proceso de revitalización del Centro de Horticultura y Floricultura “Lothar Blunck”, y en el trabajo colaborativo que impulsa el Nodo de Ciencia Austral, con la participación de instituciones como el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) y actores del mundo rural regional.

Juan Carlos Aravena, director del Instituto de la Patagonia, valoró la participación activa de las agricultoras, y destacó el carácter mixto de la jornada, articulada entre objetivos científicos y sociales. “Esto tiene que ver con revitalizar el Centro Hortícola, pero también con la hoja de ruta del Nodo de Ciencia Austral, donde la seguridad alimentaria es un punto clave para la región y la macrozona. Lo interesante es que ya estamos avanzando: trabajar con las bases, con los productores, los que tienen una realidad que a nosotros se nos pasa de repente”, señaló. 

Julio Yagello Díaz.

Desde el equipo técnico, Julio Yagello Díaz —encargado del Centro— explicó que uno de los objetivos planteados fue volver a los principios fundacionales del espacio, pensado como un lugar de producción, pero también de resguardo identitario. “Lo que se busca es generar una especie de refugio biocultural, que tenga pertinencia territorial, y donde la participación de la agricultura y de la comunidad de Magallanes sea destacada. Que no se quede solamente en la investigación ni en la docencia, sino que también abarque la vinculación”.

Rosa Cárdenas Téllez.

Una de las voces protagonistas fue la de la agricultora Rosa Cárdenas Téllez, quien cultiva hortalizas y frutillas en su parcela de Prolongación Martínez de Aldunate. “Salgo muy contenta de esta reunión porque hay compromiso real. Esto puede llegar lejos. Necesitamos una planta para trabajar los productos y darles valor agregado, volver a tener la plantinera que tuvimos hace años y que fue tan buena para nosotros. Y yo tengo muchas energías aún. Me encanta lo que hago”, afirmó.

Según indicó Yagello, el centro está actualmente ejecutando un convenio con INDAP, y se proyectan nuevas alianzas con el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y organizaciones rurales locales. “Queremos que los agricultores también vengan a ver producciones, que conozcan lo que se puede hacer acá, y que podamos estudiar juntos sus inquietudes. Por ejemplo, surgió el interés por investigar el uso de bioestimulantes a base de algas”, agregó.

La Seremi de Agricultura, Irene Ramírez Mérida, valoró el espacio como una oportunidad concreta para reactivar el vínculo entre la Universidad y la agricultura familiar campesina. “Hoy en día el desafío es avanzar en soberanía y seguridad alimentaria, pero con un actor importante que es la Universidad de Magallanes. Ésta es una primera instancia de coordinación para fortalecer las instalaciones y el sistema productivo del Instituto, con un trabajo directo con los agricultores y agricultoras”, expresó.

Seremi de Agricultura y director del Instituto de la Patagonia.