Estudiantes de primer año de Enfermería vivieron Investidura 2024 llamada “Ceremonia de la Luz”

Facultad de Ciencias de la Salud, Portada UMAG, noticias

Por Vitalia González (nota) y Mónica Araus (fotos), Dirección de Comunicaciones

En el Auditorio Ernesto Livacic, acompañados por sus familiares y amigos, un total de 75 estudiantes de primer año de la carrera de Enfermería de la Universidad de Magallanes (UMAG) vivieron su Investidura denominada “Ceremonia de la Luz 2024”, un acto organizado por el Centro de Estudiantes que marca un hito trascendental en sus estudios superiores: el inicio de sus prácticas clínicas, donde tendrán contacto directo con las y los usuarios.

“Hoy comienzan una travesía que transformará sus vidas. A lo largo de este camino, no sólo aprenderán conocimientos científicos y técnicos, sino también el valor de la empatía, la resiliencia y la humildad. Cada paciente que tengan el honor de atender será una oportunidad para aprender algo nuevo y marcar la diferencia (…) Lleven con orgullo su uniforme y recuerden siempre que están llamados a ser agentes de cambio en el cuidado de la salud y el bienestar de nuestra sociedad”, fue el mensaje que les entregó su jefa de carrera en el inicio de la ceremonia, la académica Tamara Villalobos.

Por su parte, su colega y directora de Departamento, Marisol Popovich resaltó que, este momento “marca el inicio de un camino de dedicación y servicio a la comunidad, donde, con su uniforme azul, los estudiantes brindarán cuidados humanizados basados en modelos y teorías de enfermería”. Al mismo tiempo, recordó que “se necesitan profesionales que acompañen a las personas y sus familias, siempre guiados por los valores de la universidad”.

Francisca Díaz, presidenta del Centro de Estudiantes, destacó en su discurso que, sus compañeros y compañeras, “están iniciando una vocación, no solo una carrera. Tienen la responsabilidad de ser profesionales competentes, empáticos y éticos, siempre dispuestos a aprender. Nos formamos para acompañar y cuidar, y al vestir este uniforme azul, asumimos el compromiso de cuidar vidas y representar los valores de nuestra profesión: confianza, esperanza y humanidad. Al ponernos este uniforme, debemos sentirnos orgullosos, pues simboliza no solo nuestra profesión, sino también nuestra vocación de hacer el bien y marcar una diferencia”.

Para sellar de simbolismo la instancia, las y los futuros enfermeros encendieron sus velas de luz LED y pronunciaron unas palabras que representan su compromiso y legado. Prometieron aprender y crecer como profesionales, a tratar a cada paciente con respeto y compasión, a mantener la confidencialidad y a trabajar en equipo, valorando la vida y dignidad de cada persona. Además, se comprometieron a esforzarse por brindar cuidados de calidad, a buscar siempre el conocimiento y la ética en sus prácticas, con el objetivo de hacer una diferencia positiva en la vida de los demás.

Antonia Pozo, estudiante de primer año, comentó que la ceremonia tenía un significado muy especial, ya que marcaba el inicio de una nueva etapa en sus vidas. “Iniciamos nuestras prácticas clínicas, y todo lo que hemos aprendido hasta ahora se vuelve mucho más serio al enfrentar la realidad de trabajar directamente con los pacientes. Estoy muy feliz, la ceremonia fue hermosa y agradezco profundamente al Centro de Estudiantes por su dedicación”, dijo.

Brandon Raicahuín, en tanto, expresó que la ceremonia fue muy emotiva y un momento realmente especial para él. “Hoy, al comenzar nuestras prácticas clínicas, siento que es sólo el primer paso de muchos. Durante este primer año, he comenzado a comprender el peso de lo que estoy estudiando y la responsabilidad que implica, pero también me doy cuenta de lo hermosa que es esta carrera”, destacó.