En dependencias del Liceo Industrial Armando Quezada Acharán y en una ceremonia encabezada por el rector de la Universidad de Magallanes, José Maripani Maripani y el seremi de Educación, Valentín Aguilera Gómez, el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE) conmemoró 10 años desde que fuera implementado por la UMAG en la región, desempeñando un papel importante al brindar apoyo académico, orientación vocacional y acompañamiento continuo a los y las estudiantes de enseñanza media.

En la oportunidad, el rector Maripani subrayó la importancia del programa en la búsqueda y acompañamiento de talentos jóvenes, permitiéndoles desarrollar su potencial y demostrando que la educación superior es accesible para todos. “Todos necesitamos a alguien que nos diga que sí podemos, que podemos salir adelante y creo que el PACE ha cumplido muy bien con esa labor”, puntualizó.

El PACE tuvo sus inicios en 2014 como un plan piloto del Ministerio de Educación buscando reducir la segregación, aumentar la equidad y la inclusión y contar con un país más integrado social y culturalmente. Su principal propósito es restituir el derecho a la educación superior de estudiantes de sectores socioeconómicamente desfavorecidos de 3º y 4º año medio que enfrentan barreras de formación académica, bajas expectativas educativas, poca información vocacional y falta de financiamiento para su desarrollo académico, mediante la realización de acciones de preparación y apoyo permanente, así como también de aseguramiento de cupos, por parte de las 29 instituciones de educación superior participantes del programa, con miras a lograr su titulación.

Al respecto, el seremi Aguilera destacó el impacto del PACE en Magallanes, asegurando que ha logrado beneficiar a 1.400 estudiantes de 3º y 4º años medio de 9 establecimientos educaciones públicos de la región. “Este programa se implementó durante el segundo mandato de la presidenta Michelle Bachelet y se consolida durante este gobierno incrementado el porcentaje de estudiantes que pueden acceder por medio del PACE a la educación superior y también ampliando el número de establecimientos educacionales. El contar con este tipo de programas es muy relevante desde el punto de vista de acceso, pero también hemos logrado incrementar el financiamiento a través de la gratuidad, lo que ha sido un desafío para el Ministerio de Educación”, expresó.

Actualmente, el PACE tiene un despliegue territorial que abarca las cuatro provincias de la Región de Magallanes: Última Esperanza (Liceo Bicentenario de Excelencia Gabriela Mistral y Liceo Bicentenario Luis Cruz Martínez) Magallanes (Instituto Superior de Comercio José Menéndez Liceo Bicentenario, Liceo Politécnico Cardenal Raúl Silva Henríquez, Liceo Polivalente María Behety de Menéndez, Liceo Industrial Armando Quezada Acharán y Liceo Polivalente Sara Braun), Tierra del Fuego (Liceo Bicentenario Hernando de Magallanes) y Antártica (Liceo Bicentenario Donald Mc Intyre Griffiths)

Experiencias que inspiran

Para Christopher Canales Pacheco, primer egresado del programa PACE el 2022, quien se tituló de la carrera de Técnico en Educación Especial, “el PACE es un programa muy completo que ayuda bastante cuando uno hace el salto desde la educación media a la educación superior. La verdad que un apoyo como el que brinda el PACE es muy necesario para poder mantenernos en nuestras carreras y manejar distintas situaciones que se nos pueden presentar. En el tiempo en el que participé como estudiante recibí varias tutorías, además de orientación en cómo organizar el tiempo, ayuda en manejo del estrés y asesoramiento psicológico. Los profesionales que te designan siempre están abierto a ayudarte en cualquier momento. Es un orgullo ser uno de los primeros graduados del programa y que me consideren para poder compartir mi experiencia con las nuevas generaciones”, precisó.

En tanto, el profesor Carlos Contreras de la especialidad de Mecánica Automotriz del Liceo Industrial se refirió a la experiencia de viajar a Santiago para participar en la ceremonia oficial de los 10 años del PACE realizada en el Liceo Benjamín Franklin. “Fue una experiencia bastante enriquecedora porque fue un reconocimiento a la docencia que yo hago junto a los estudiantes de un colegio vulnerable; la verdad es que nos cuesta mucho salir de donde estamos y además se nos dificulta bastante el poder trabajar día a día con ellos. Fue algo espectacular, no me lo esperaba sinceramente; es un reconocimiento al trabajo que cada docente realiza en todos los colegios de Chile”

Según resaltó el profesor “este programa partió el 2014 como un plan piloto y el 2015 se transformó en política pública y entonces además de entregar cupos para la educación superior nos ayuda con los estudiantes a darles las herramientas para que ellos puedan proseguir estudios universitarios, para que no tengan que andar pateando piedras en las calles, sino para que el día de mañana tengan un título profesional”, finalizó.