Pasadas las 11:00 de la mañana de este sábado, se dio el vamos a la cicletada organizada por el Proyecto Asociativo Regional EXPLORA Magallanes y Antártica Chilena. El recorrido partió de la Plaza de Armas, bajó por calle Roca y continúo por la Costanera del Estrecho, para finalizar en la Universidad de Magallanes. Aunque las condiciones climáticas no fueron favorables, en la misma participaron, más o menos, 200 personas.
Esta fue una de las actividades con las que se dio fin al Campamento Científico Escolar 2015, tras 6 días de funcionamiento.
La Familia de Franco Vera participó de la cicletada que llegó hasta dependencias de la Umag.
Natalia Cabrera fue una de las mamás que participó en la cicletada, junto a su hija Camila Valdivia. Para esta niña que a partir de marzo comienza su tercero básico, la actividad de hoy fue la que más le gustó de esta semana de aprendizajes. Natalia cree que “es una iniciativa súper entretenida para los chicos, para que se incentiven a hacer deporte”.
Franco Vera es la cuarta vez que participa en la cicletada, pero este año lo hizo junto a sus padres y su hermano menor, Nicolás, que aún no sabe andar en bicicleta, pero que pudo hacer el recorrido gracias al trail gator, un tipo de remolque para niños pequeños, que permite que monten su bici acoplada a la de un adulto. Yerko Vera, el padre, comentó que es primera vez que vienen juntos, y que aunque fue una experiencia difícil por las condiciones climáticas, principalmente el viento, “es bueno participar en familia y es buena la convocatoria”.
A su llegada a la UMAG los asistentes pudieron ver la exposición de los trabajos finales, en el patio central de la Facultad de Ingeniería. Tras esto, las actividades se trasladaron al gimnasio. Allí los talleres Explorines, Explora con Lupa y Teatro y entorno hicieron sus presentaciones artísticas. Los integrantes de este último deleitaron al público presente con el montaje teatral Salvemos nuestras aves.
Uno de los protagonistas de la obra fue Fabián Morales, que tiene 13 años. Él participa en el Campamento Científico Escolar desde que tenía 6 años. Fabián piensa seguir asistiendo a esta instancia las próximas vacaciones, “porque uno puede tener varias relaciones, varios amigos… se pasa bien”.
Los dos hijos de Patricia Bravo es primera vez que asisten. Ella opina que además de todo lo que aprendieron “le dio la oportunidad de interactuar con otras personas, con otros niños, de otros colegios, y le sacó hartas cosas de su personalidad, que yo no conocía; así que estoy contenta por todo lo que aprendieron y porque le ayuda en la personalidad”.
Para Elena Melo esta es una actividad que siempre agenda en su calendario anual. Su hijo Daniel viene desde hace años a los talleres EXPLORA. “Para él ha sido tremendamente significativo estar en este grupo. A mí me emociona y me llama mucho la atención que cada año se ha cautivado para venir acá”, confesó.
Durante el Campamento Científico Escolar estudiantes de la región pudieron asistir a una oferta de 17 talleres, en los que participaron 450 niños, desde los 4 y hasta los 17 años.
