“La reforma (educacional chilena) hay que pelearla; es una lucha que hay que dar”
2014/11/06Facultad de Ciencias, Facultad de Ciencias Económicas y Jurídicas, Facultad de Ciencias de la Salud, Facultad de Educación y Ciencias Sociales, Facultad de Ingeniería, noticias
Académica de Costa Rica compartió experiencias de su Universidad con estudiantes, académicos, funcionarios de Vinculación con el Medio y organizaciones sociales.
Rita Meoño se doctoró en Trabajo Social en Brasil, con una investigación en Educación Superior Pública. Hoy es docente de la Universidad de Costa Rica, su país natal, y una de los 12 integrantes del Consejo Universitario, segunda instancia de toma de decisiones después de la Asamblea Universitaria. Desde allí ha realizado una labor, principalmente, enfocada hacia la responsabilidad social universitaria, área que la Universidad de Magallanes está empeñada en fortalecer, tanto desde los cambios orgánicos – se creó una Unidad de Responsabilidad Universitaria dependiente de la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio, iderada por la terapeuta ocupacional magíster en Educación, Melissa Flores – como desde la articulación con las organizaciones del mundo civil y las instituciones públicas.
Ése es el contexto que recibió a la Doctora Meoño, quien compartió experiencias de democracia, participación, acción política, artística y social de su casa de estudios, con docentes, estudiantes, funcionarios y directivos de nuestra Universidad, y también con líderes de grupos locales de voluntariado, como la representante de los dializados y de otras 50 agrupaciones reunidas en AREVOL, Marlene Miranda. En la ocasión, la dirigente planteó su preocupación por la falta de apoyo del Estado que es, finalmente, el que se ve beneficiado con la acción de estas organizaciones. Al respecto, Meoño aconsejó mirar el problema desde la justicia y no desde la caridad, afirmando que “no es pidiendo dinero como van a superar los obstáculos, sino exigiendo sus derechos”.
La experiencia de la Universidad de Costa Rica, estatal y formada con el apoyo de la Universidad de Chile, corresponde a la de un país pequeño que no llega a los 5 millones de habitantes; que carece de Ejército; tiene consultas ciudadanas por temas de importancia nacional, y garantiza el presupuesto educacional con la misma Constitución. Desde la perspectiva de esta académica y dirigente universitaria, “la acción social no puede estar aislada de la docencia y de la investigación”, porque es haciendo servicio público y estudiando la realidad, como el estudiante aprende a ser un profesional cuyo fin último sea siempre el bien común.
La Doctora Meoño también relató cómo los estudiantes participan del gobierno universitario, y hasta gestionan sus propios medios de comunicación, e instó a los alumnos que acudieron a escucharla, a participar organizadamente de la historia de su país, porque “la reforma (educacional chilena) hay que pelearla; es una lucha que hay que dar”.