-La enfermera Karina Martinic y la psicóloga Verónica Aravena, enfatizan en tips y consejos para sobrellevar, de la mejor manera, este período de “quedarse en casa” para el resguardo sanitario de la población magallánica.

El llamado aislamiento social que sobrevino con la llegada de la pandemia por el coronavirus en nuestra región, ha derivado en un prolongado confinamiento de la población magallánica, que, incluso, tuvo la cuarentena obligatoria, en la ciudad de Punta Arenas, más extensa de nuestro país, totalizando más de un mes de encierro en los hogares.

La enfermera especialista en Salud Mental, Karina Martinic Gutiérrez y la psicóloga Verónica Aravena Briones, ambas profesionales de la Consejería Estudiantil en Salud Mental de la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAE) de la Universidad de Magallanes, se refieren a este tema para ayudar a la comunidad a llevar mejor este estado permanente de distanciamiento al que debemos atenernos.

Cuarentena: sus efectos y cómo enfrentarlos

Verónica afirma que esta situación “puede traer una serie de consecuencias a nivel psíquico debido al estrés experimentado”. Por otro lado, dice que “el temor y la ansiedad con respecto a una enfermedad pueden ser agobiantes y generar emociones fuertes, tanto en adultos como en niños”.

“El estrés durante el brote de una enfermedad infecciosa –agrega- puede incluir diversas reacciones, como el miedo y la preocupación por la propia salud y la de los seres queridos, cambios en los patrones de sueño o alimentación, dificultades para dormir y concentrarse, sensación de incertidumbre y sentimientos de soledad, pudiendo llegar a vivir estados de pánico y sintomatología depresiva, así como agravamiento de problemas de salud crónicos y de salud mental previos, dependiendo de cuánto se extienda la situación de cuarentena y de las redes de apoyo presentes”.

Según precisa la profesional todo esto varía de una persona a otra, tomando en cuenta factores como la edad, el sexo, el estado de salud físico y mental previo, la situación laboral y económica, las redes de apoyo y la capacidad de afrontamiento al estrés y resiliencia.

En este último concepto, se detiene, al asegurar que “es un aspecto que podemos trabajar y mejorar de manera personal, para disminuir el grado de estrés y tensión experimentados, así como para sacar provecho y aprender de la crisis haciendo uso de la capacidad de afrontar las situaciones adversas que se experimentan”.

La resiliencia apunta a la capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y potencialmente traumáticas, sobreponiéndose y fortaleciéndose gracias a ellas. “Aprender a convivir con el estrés del momento actual permitirá que quien lo logre, así como las personas importantes de su vida y su comunidad, se vean fortalecidos”, enfatiza.

Verónica Aravena Briones, psicóloga Consejería Estudiantil en Salud Mental DAE UMAG.

De todas formas, una recomendación importante es buscar asistencia si se necesita. “Si se están experimentado algunas de las reacciones enunciadas durante más de quince días, hay que buscar ayuda profesional a objeto de valorar si se precisa una atención especializada. Debido a las circunstancias actuales, se está ofertando ayuda remota de modo telefónico y online”, comenta la psicóloga de la DAE.

Es así que, en este contexto, cuidar la mente de los ánimos y sentimientos negativos resulta ser clave. Para la especialista, se trata de “mantener cierta perspectiva sobre la situación. Una calma que permita que evitemos pensamientos catastróficos, evidenciando la situación pasajera y coyuntural que estamos viviendo. Por supuesto, siguiendo las recomendaciones sanitarias y entendiendo que llegan por nuestro bien”.

De esta forma, se aconseja lo siguiente:

• Informarse y /o conocer los datos sobre la situación, en un medio oficial y fidedigno.

• Compartir información precisa sobre el Covid-19, lo que puede ayudar a que otras personas se sientan menos estresadas y al mismo tiempo conectarse con ellas.

• Compartir historias y experiencias positivas de personas que han tenido la enfermedad y se han recuperado o han recibido el apoyo de las personas que aman.

• Organizar el tiempo para saber en qué momentos leer la última información de las noticias sobre el coronavirus para que no cause estrés o ansiedad; y evitar la información que genere estos sentimientos.

• Entender el riesgo para sí mismo y para los seres queridos puede lograr que una cuarentena debido a un brote, resulte menos estresante.

• Si su asistencia al trabajo se va a ver afectada explique con claridad a su empleador las circunstancias en las que está por culpa de la pandemia.

• Mantener conexión online con seres queridos y amistades, es decir, estar en contacto con las personas en las que uno confía, es la mejor forma de reducir la ansiedad, la depresión, la soledad y el aburrimiento durante un aislamiento social por cuarentena.

•Poner atención a las propias necesidades y sentimientos, así como expresarlos a las personas con las que se tiene más confianza y cercanía.

• Establecer un plan diario de actividades, fijando una rutina con metas sencillas, lo que hace que las horas pasen también con mayor facilidad.

• Mantener hábitos saludables: higiene y cuidado personal diario, hacer algún ejercicio que agrade y relaje; dormir las horas habituales y comer de modo saludable y regular.

• Relajar el cuerpo a menudo con técnicas de respiración, meditación, yoga, ejercicio físico, estiramiento, juego, canto, baile y otras artes

• Hacer esfuerzos por mantener el ánimo alto y considerar que este aislamiento le puede resultar provechoso. Aunque encontrarse triste, con ansiedad y preocupación está dentro de lo esperable para esta situación, respirar profundo y soltar esos sentimientos con cada expiración ayudará a aceptar y fluir con más liviandad y buen humor hacia la nueva situación, lo que seguro abrirá nuevas opciones y oportunidades.

Karina Martinic Gutiérrez, enfermera Consejería Estudiantil en Salud Mental DAE UMAG

Karina Martinic, añade que es importante tomar en cuenta que “cada persona tiene sus propios mecanismos y ritmos para hacer frente a esto y eso hay que respetarlo”. Sobre aquello, precisa que “frecuentemente se ven ‘recomendaciones’ de ‘cosas que debes hacer en cuarentena’ que solo ayudan a poner más presión y estrés en las personas. Creo que evitar la sobre exposición a medios y redes sociales ayuda a estar más tranquilos, es decir, informarse pero sin sobreexponerse”.

El llamado es a “mantenerse serenos en casa, implementar rutinas, tanto de trabajo como de esparcimiento y en este punto, realizar actividades que nos hagan sentir mejor”.

Pese a todo, las profesionales insisten hacer el ejercicio de tener presente que esta situación pasajera es excepcional y se acabará, y que, cuando salgamos de ella, es importante tener en cuenta ciertas medidas para reducir las reacciones de estrés post traumático:

• Conocer los síntomas del estrés Post traumático, incluidos los físicos (cansancio, enfermedad) y los mentales (temor, aislamiento, culpa).
• Tomarse un tiempo para la recuperación de sí mismo y la familia, destinando por lo menos algunos fines de semana a conversar y distraerse juntos.
• Crear un menú de actividades de cuidado personal que disfrute, como pasar tiempo con amigos y familiares, hacer ejercicio o leer un libro.
• Descansar de la cobertura que hacen los medios con respecto al COVID-19.
• Practicar Respiración Consciente y Completa https://www.aiyayurveda.com/respiracion-yoguica-o-respiracion-completa/
• Escuchar Frecuencias (musicales) que ayudan a limpiar nuestra energía psíquica mental y emocional, a eliminar el miedo subyacente a la situación experimentada, a curarnos del trauma que ha significado y a mejorar nuestro estado emocional y aumentar nuestro grado de felicidad. Se sugieren las Frecuencias 396, 432, 528, 741, 751 y 852 (todas disponibles en You Tube).
• Cuidar la salud física y mental, realizando controles médicos y psicológicos si se siente necesario, especialmente si la persona se siente agobiada por más de una semana o si siente que la situación ha afectado la capacidad de cuidar a su familia y de realizar el trabajo que tenía antes del brote.

• Continuar con tratamientos relacionados a problemas previos en el área de la salud física y mental, estando atentos al agravamiento o aparición de nuevos síntomas.

Consejería Estudiantil en tiempos de Coronavirus

Karina y Verónica, preocupadas de este nuevo escenario que enfrenta la población y con el apoyo del equipo directivo de la DAE, elaboraron una propuesta como Consejería en Salud Mental para generar espacios terapéuticos en la comunidad estudiantil y mantener la continuidad de los controles de salud en quienes lo requieran.

La atención se lleva a cabo vía online, es decir, una tele consejería que consideran “una herramienta eficaz para mejorar la calidad de vida de quienes, por aislamiento o cuarentena voluntaria u obligatoria, no pueden acceder a ella de manera presencial”.

Cualquier estudiante que requiera de este servicio puede contactarse con la Consejería de la siguiente manera:

1. Una vez recibida la solicitud a través de correo institucional (consejeriasaludmental@umag.cl), una profesional tomará contacto con el/la estudiante y coordinará las sesiones.
2. Las sesiones se realizarán a través de video llamadas, con la utilización de plataforma meet. google, de acuerdo a disponibilidad de la profesional y del/la estudiante.
3. Los horarios de trabajo serán distribuidos de acuerdo a la necesidad de atención y según los contratos de trabajo de cada profesional.

La Consejería Estudiantil en Salud Mental de la UMAG, realiza atención primaria de salud a nivel individual y/o grupal, y su principal ámbito de acción es la promoción de la salud mental y prevención de problemas prevalentes.

“Próximamente, difundiremos algunos tips para proteger la salud mental en casa y en medio de los estudios y el teletrabajo en estas circunstancias orientados a la comunidad universitaria, los que se publicarán a través de los principales medios institucionales”, finalizaron las especialistas.