Directivos académicos que forman parte de la Red Nacional Universitaria de Escuelas de Terapia Ocupacional, se dieron cita, por segunda vez, en la Universidad de Magallanes (UMAG) para llevar a cabo una sesión de trabajo correspondiente al último semestre de 2019.

El principal foco de esta reunión fue el análisis de uno de los temas que mayormente preocupa a la profesión y que es la incorporación de las prestaciones que realizan los y las terapeutas ocupacionales al sistema Fonasa, una medida que ya se anunció y que sólo está a la espera de la asignación presupuestaria por parte del Ministerio de Hacienda.

Así lo informó la directora docente de la Escuela de Terapia Ocupacional de la Universidad Mayor, María Cristina Fernández Orellana, quien, tras el encuentro y junto al director del Departamento de Terapia Ocupacional de la UMAG, Wilson Verdugo Huenuman, se refirió a los tópicos abordados en esta reunión, que, dos veces al año, sesiona en relación a los principales desafíos del área en la educación superior.

“Hoy día el foco de trabajo apunta a un hito muy relevante para la profesión que es su incorporación a Fonasa con prestaciones básicas que se están estableciendo, y que hoy día está en proceso a nivel gubernamental para poder generar asignación de financiamiento, pero esto debiera formalizarse en el Diario Oficial y estar operativo en el corto plazo”, sostuvo la académica.

Las ventajas de dar este importante paso en el sistema público de salud, afirma la docente, es que “abre una posibilidad importante para la profesión, pero sobre todo para los usuarios de Terapia Ocupacional, ya que la no existencia de estas prestaciones validadas por el Estado, implicaba que la atención fuera de carácter privada”. De esta forma y de concretarse pronto, “va a ampliar un poco la cobertura y la posibilidad de la población de acceder a los servicios de Terapia Ocupacional”, afirmó.

Otro de los temas en el que también ha concentrado su atención esta Red es el aumento de la oferta académica en la especialidad que, en el último tiempo, ha registrado la apertura de a lo menos 10 programas universitarios de Terapia Ocupacional. “Eso –explicó Fernández- tiene una implicancia desde el punto de vista del mercado laboral, por una parte, pero también de cómo, para la red, es un desafío sostener ciertas condiciones de calidad de formación, y estamos estableciendo lineamientos para trabajar sobre la base de un estándar mínimo a nivel nacional”.

Al respecto, el académico UMAG, Wilson Verdugo, añadió que “es una tremenda responsabilidad porque estamos trabajando por mejorar la calidad de formación de todos los terapeutas ocupacionales en Chile que hoy día son más de 11 mil según los últimos datos y, por lo tanto, también somos responsables de esa formación y de elevar esos estándares porque finalmente trabajamos con personas que se merecen la mejor atención”.

La instancia, que se creó en el año 2013, reúne con una periodicidad semestral a los directores de escuelas de más de 10 casas de estudios a nivel nacional, de las que forman parte más de  6 mil estudiantes de pregrado.

En su cuarta sesión, celebrada en noviembre de 2014, la UMAG recibió por primera vez a los integrantes de la Red, encuentro en el que también participó el jefe de la Unidad de Educación del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Enrique Azúa.