Superintendencia de Educación busca apoyo de la UMAG para formación y registro de Mediadores Escolares
2018/11/15noticias
-
La Superintendencia de Educación es un órgano estatal que, según la Ley 20.519, debe resguardar una educación de calidad, capacitando a los establecimientos en la normativa; asesorándolos en sus reglamentos internos, y recibiendo denuncias. La ciudadanía, en general, la identifica con este rol fiscalizador, pero desde 2014 tienen, además, una segunda función no menos importante, y sus profesionales están empeñados en difundirla.
Se trata de la figura de mediación, herramienta de gestión colaborativa del conflicto que se aplica al presentarse una petición en la Superintendencia. Esta unidad invita a las partes a dialogar en sesiones conjuntas o privadas, voluntarias y susceptibles de culminar en acuerdo o desacuerdo, pues el poder lo tienen las partes. En general, el resultado de esta instancia es positivo, según informa la Coordinadora Nacional de la Unidad de Mediación de la Superintendencia, Mónica Contreras, quien visitó Magallanes para apoyar a la repartición regional, en la tarea de incrementar su registro de mediadores, donde sólo hay uno activo de los apenas 5 inscritos.
Una de las estrategias que se pensaron fue explorar un posible apoyo por parte de la Universidad de Magallanes, lo cual se comenzó a concretar esta semana, con una reunión sostenida por Contreras y el encargado regional de la Unidad de Comunicación y Denuncia, Ignacio Gallardo, con autoridades institucionales y representantes de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales. En ella, el departamento de Trabajo Social informó que en 2014 realizó un Diplomado en Mediación, gracias al cual 30 profesionales fueron certificados como mediadores escolares, y que en 2019 se llevará a cabo una nueva versión.
La directora del Departamento, Lorena Aguilar, se comprometió a enviar la nómina de personas certificadas, para que desde la Superintendencia se promueva su inscripción en el registro de Mediadores Escolares, mientras la decana Anahí Cárcamo y Mónica Contreras acordaron coordinarse para concretar un curso o taller dirigido a estudiantes de último año de Pedagogía. Al mismo tiempo, el vicerrector José Maripani aventuró la posibilidad de ocupar un espacio en el futuro Centro Asistencial Docente de Investigación (CADI UMAG), para que funcione una Clínica de Mediación.