-La actividad académica destacó por un completo montaje en el hall de la Facultad de Ciencias de la Salud que incluyó música y el vestuario típico de cada una de las culturas culinarias que se representaron.

La cocina francesa estuvo presente en la muestra de los estudiantes.

La influencia de la alimentación extranjera en Chile, fue el sello de la exposición gastronómica que presentaron a evaluación los 56 estudiantes de primer año de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad de Magallanes en el contexto de la asignatura introductoria Ciencia de los Alimentos.

La muestra consistió en un despliegue de 6 stands con la cocina típica de Croacia, Perú, Colombia, Italia, Francia y Palestina; cerca de 60 diferentes preparaciones que contemplaron las más diversas recetas de platos fríos, calientes, cocteles y postres de las distintas culturas culinarias de América, Europa y Asia que han tenido protagonismo en nuestro país producto de la llegada de cientos de miles de inmigrantes a lo largo de los años.

“La asignatura Ciencia de los Alimentos lo que busca es que el alumno, cuando ingresa a la carrera, tenga una idea de cómo se formó nuestra herencia culinaria y como ésta se conecta con otras culturas, sobre todo, las que tienen relación con nuestro país en el tema migratorio”, afirmó la académica Andrea Mansilla, quien recorrió los puestos de exhibición degustando uno a uno los alimentos preparados junto a un grupo de nutricionistas que hicieron de jurado en el certamen estudiantil.

De igual forma, la docente destacó la importancia de este tipo de ejercicios, asegurando que se trata de una iniciativa clave para enriquecer la formación profesional de los jóvenes. “Ellos cuando lleguen al cuarto año y tengan sus prácticas en el nivel primario de atención, en las consultas nutricionales no sólo llegarán chilenos, llegarán colombianos, peruanos, etc. que tienen un sistema de alimentación diferente, el que van a tener que reconocer y saber evaluar. Entonces esa es la idea”, agregó.

Para los estudiantes la experiencia en la cocina fue entretenida y les permitió, sobretodo, aprender a trabajar en equipo. Las alumnas Camila Fideli e Isidora Espina del grupo croata, por ejemplo, comentaron que elaboraron todos los platos en conjunto y así lograron se familiarizarse con preparaciones como el strudel de manzana, las prsuratas, gulas de pollo y pasticada dálmata, entre otras.  “No es difícil la cocina croata, pero toma tiempo y se trata de comida que tiene harta azúcar, y en algunos casos lleva licor, entonces se debe tener en cuenta la cantidad en el consumo”, añadieron.

Profesores, funcionarios y estudiantes de otras carreras de Salud disfrutaron con el recorrido gastronómico que además contó con una llamativa puesta en escena llena de colores, música y los vestuarios característicos de cada una de las 6 naciones.