Ex alumno del Conservatorio entregó claves para una práctica efectiva durante el estudio

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Una parte de su exposición, consistió en hacer demostraciones en distintos instrumentos de percusión; en este caso, los timbales.

Jaime Cárdenas España de 26 años, es percusionista y está radicado, actualmente, en Cleveland, Estados Unidos. Entre los años 2005 y 2008, estudió en el Conservatorio de Música de la Universidad de Magallanes y, posteriormente, hizo carrera de formación en la Universidad de Chile.

Buscando especializarse, partió al país norteamericano a principios de 2013, y, desde esa fecha, nutre su trayectoria; primero en la Universidad de Georgia y hoy, en la Cleveland State University. Paralelo a ello, además, ha podido fortalecer su aprendizaje en distintos festivales, presentaciones de orquestas y otras instancias musicales de nivel internacional.

Con todo este bagaje, Jaime vino a Chile recientemente y -además de otras actividades-estuvo en su natal Punta Arenas reunido con estudiantes del Conservatorio de Música de la UMAG, intérpretes, compositores, profesores y aficionados a la Música, a quienes entregó su experiencia en el extranjero y todos los conocimientos que ha podido adquirir mediante la charla denominada “Práctica efectiva: optimización del tiempo durante la hora de estudio”.

A través de esta presentación, el joven músico, quiso entregar algunas claves a la hora del estudio, tanto en el ámbito técnico como personal. Hizo hincapié, por ejemplo, en la importancia del profesor, de ser autosuficiente, y de llevar las proyecciones de la práctica con perseverancia y organización, planificando siempre los objetivos. Se refirió, asimismo, a las herramientas básicas que aconseja utilizar como un grabador, un metrónomo y un buen sistema de sonido, consejos que dio con demostraciones en timbales, una caja orquestal y un xilófono.

“Empujen y empujen, aunque les digan que no siempre se puede”, fue el mensaje que enfatizó ante los ojos atentos de los niños y adolescentes que colmaban la primera fila del Auditorio donde brindó la charla. Y al final concluyó: “uno no es mal músico, es mal practicante, por ello hay que saber cómo trabajar y cómo solucionar los problemas. Una de las cosas que hago y que me enseñaron es a usar la adrenalina a tu favor, es decir, volverse un experto en saber tocar nervioso”.