Estudiantes de Educación Parvularia presentaron proyectos de práctica profesional
2016/12/20Facultad de Educación y Ciencias Sociales, noticiasEl rescate de la historia oral, la conciencia por el cuidado del medio ambiente, la imaginación del cine; el desarrollo socio-afectivo del niño; y el vínculo con su paisaje urbano son algunos de los tópicos abordados en la presentación de proyectos de Práctica Profesional de Educación Parvularia.
En una jornada realizada en la Sala Terra Australis, las futuras profesionales dieron a conocer los resultados aún preliminares de sus proyectos de investigación y que forman parte de la etapa de conducente a la obtención del título profesional.
Cinco fueron los proyectos presentados en la jornada, donde se encuentran “Aprendizaje emocionante” de Máyara Montenegro; “Huellas del pasado, huellas para mi vida” de Carla Mansilla Salas; “Niños, Cámara y Acción” a cargo de Loreto Pacheco y Valentina Vidal; “Punta Arenas, una ciudad de la cual aprender” de Sara Barría y Nathaly Delgado; y “Residuos Plásticos. Proyecto educativo con niños de educación preescolar” a cargo de Gabriela Maldonado y Cindy Pérez.
La coordinadora de los proyectos llevados adelante por las estudiantes, Mirna Pizarro, destacó el esfuerzo y vinculación con el medio que representa esta importante fase formativa donde se destaca la innovación de los temas elegidos, así como la retroalimentación de las capacidades que las futuras profesionales de educación parvularia imprimen en este proceso.
La estudiante Máyara Montenegro señaló que el proyecto pretendía generar un conocimiento en los párvulos sobre su desarrollo emocional “Se trabajó en tres distintas etapas, ya sea a través de dibujos, conocimiento, videos, cuentos. Las comentaron y luego realizaron actividades como yoga, meditación, mesoterapia, terminando con la elaboración de un libro de las emociones creado por ellos mismos”.
Por su parte, Nathaly Delgado explicó que su proyecto buscaba integrar a la ciudad como el eje para el aprendizaje de la lecto-escritura en los niños, lo cual en un lapso de 4 meses en el colegio Francés implicó trabajar con las señaléticas, relatos, etc. “Los niños aprendieron e integraron muchos conceptos a su vocabulario. Es decir, aprendieron en la ciudad y con la ciudad”