En la ceremonia del Día Internacional de los Museos que se celebró el miércoles 18 de mayo, la Red de Museos de Magallanes, quiso distinguir a uno de sus benefactores: el magallánico, Claudio Buratovic, quien, el 2012, decidió donar al Museo del Recuerdo del Instituto de la Patagonia un inmueble que, hace aproximadamente, 8 décadas atrás, albergó un centro de administración de telecomunicaciones en Punta Arenas.

“Hemos querido llevar al Instituto una pieza que nos parece esencial en la historia de las telecomunicaciones regional,  que es una casa -una de tres- que estuvo durante 80 años en Cabeza del Mar y que sirvió como centro de administración de las comunicaciones rurales y de la vía de comunicación que Punta Arenas tenía con Argentina y, a través de Argentina, con el resto del mundo”, contó Buratovic, contento por el reconocimiento otorgado.

El magallánico agregó que “lo que estamos haciendo ahora es tratando de armar un pabellón museográfico en torno al tema de las telecomunicaciones” y que para ello “esperamos conseguir los recursos para poder restaurar la casa y hermosearla como fue en algún momento y en sus espacios colocar como exhibición, equipos telefónicos, equipos telegráficos, buzones e imágenes que de alguna manera nos recuerden el esfuerzo de los pioneros en torno  al tema de  las telecomunicaciones”.

El director del Instituto de la Patagonia, Carlos Ríos, valoró la instancia y el reconocimiento ya que, a su juicio, “los museos dependen en gran medida de lo que aporta la comunidad,  siendo el resguardo no solamente de historias personales, sino que de historias de la sociedad en su conjunto”. Concluyó satisfecho  que se trata de un  trabajo que se suma al valor  patrimonial de Magallanes a partir del cual, la idea, es seguir impulsando la conservación y el crecimiento del Museo del Recuerdo.