Fuente: La Prensa Austral

Con la quimioterapia, Daniela Soto Alvarado, de 21 años, hace frente a un agresivo tipo de cáncer, un osteosarcoma que le produjo una metástasis en los pulmones. La joven ha iniciado un tratamiento que es complejo, donde la caída de su cabello y la pérdida de peso son los primeros signos de este proceso que se espera dure unos 10 meses más.

El único especialista que hay Chile en cirugía reconstructiva articular, oncólogo ortopédico, atiende el Hospital Clínico de la Universidad Católica, en Santiago, por eso médicos magallánicos la derivaron a dicho centro asistencial, en busca de la ayuda especializada que la ayudaría a enfrentar un tratamiento para el cáncer. Sin embargo, la isapre Consalud, a la cual la joven alumna de la Universidad de Magallanes se encuentra afiliada, se niega a cubrir el tratamiento médico, por lo que en sólo diez días sus padres se han endeudado en más de 6 millones de pesos y le quedan varios meses de tratamiento.

Por esta razón, su padre Saúl Soto, quien cuenta con el patrocinio del abogado Robinson Quelín, interpuso un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, a favor de Daniela para que la isapre entregue la cobertura de enfermedades catastróficas y las Garantías Explícitas en Salud, para cubrir el financiamiento del tratamiento médico de la joven.

En el documento se informa: “Se le ha impedido realizar la gestión de solicitud de compra de bonos para ante el Hospital Clínico de la Pontificia Universidad Católica de Chile, situación que actualmente no ha podido resolver, ya que la Isapre Recurrida se niega a prestar cobertura en dicho recinto asistencial, de forma injustificada, sin que a la fecha se le pueda otorgar de forma adecuada el tratamiento de urgencia para salvar su vida”.

Explica que el hecho de realizar su tratamiento de cáncer en el Hospital Clínico de la Pontificia Universidad Católica de Chile de Santiago, dice relación única y exclusivamente con la complejidad de la patología, y con el equipo médico especializado, quienes pertenecen al staff de profesionales de ese recinto asistencial. No es una decisión antojadiza de la familia, ni del médico especialista local que derivó al norte del país a Daniela.

Los prestadores de la red de salud Isapre Consalud cuentan con oncólogos, pero no en la especialidad reconstructiva articular, por esta situación no es recomendable su traslado.

Su tratamiento comenzó seis meses tarde

Daniela es alumna de la Universidad de Magallanes, donde estudia Pedagogía en Educación Parvularia. Además era bailarina y practicaba cuatro veces en la semana, hasta que se enfermó de cáncer y no pudo continuar. Hace tres meses, comenzó con dolores, por lo que fuimos a un traumatólogo, nos dijeron que era una patología meniscal secundaria y se le diagnosticó un tratamiento kinesiológico.

El dolor aumentó de manera importante, así que el 14 de octubre, después de seis meses de presentar los primeros síntomas de la enfermedad y tras recibir dos diagnósticos diferentes, se le realizó una resonancia magnética que arrojó una lesión sugerente a un osteosarcoma. El 24 de octubre último se realizó una biopsia y otros estudios, que confirmaron el grave diagnóstico.